16 jul 2011

Problemas (o del exilio amoroso y el fútbol)

Sí. 
Es sábado, salió el sol y sin embargo estoy con problemas: el clásico rioplatense -de fútbol-, que me afecta sin escrúpulos aunque nací en el medio de la pampa húmeda y a 500 kilometros de ese río.

Apasionada como soy se me hace díficil, y a pesar de los chistecitos tontos del tipo: "Ay Diego, qué Lío" aludiendo a los delanteros de uno y otro equipo: Forlán y Messi, mi corazón no se debate nada,.

Mi corazón es tan politicamente incorrecto que esta pintadito albiceleste desde que me desperté esta mañana, esperando abrir la ventana para poder gritar ese gol que ensordezca a un vecindario celestísimo.

Mi corazón extraña el maíz inflado (pururú salado) que hacía mi mamá cada vez que jugaba la selección cuando yo era chiquita y ya me gustaba mirar los partidos de fútbol. 

Por eso, aunque no haya pururú salado, y mi living durante 90m sea un campo minado, yo ahora digo:

Vamo´ vamo´Argentina
 vamo´ vamo´  ganar
que esta barra bullanguera
no te deja no te deja de alentar

ya sé que el cantito es una antigüedad, no importa, yo ya estoy sintiendo el gustito del pururú cuando cante el primer gol esta tardecita, y eso me pone contenta.





1 jul 2011

Tres pepinos

Hoy decidí que todo me importa tres pepinos.
Sí, suena antiguo pero no me importa o para ser consecuente: sólo me importa tres pepinos.

Es así, el frío te cala los huesos -en este caso adelantándose a la osteoporosis, no olvidemos que estamos mayorcitas- y para el fin de semana el pronóstico no adelanta mejoría.

Además, esta tarde tuve ganas de prender un pucho después de casi cinco años que no fumo, vencí la tentación pero me preocuparon las ganas...

Resumiendo; parece que este fin de semana será así: con frío y con ganas.

Malhumorada.